YouTube

2022-03-04 08:28:00 By : Admin

Inicio >> Materiales >> Papel >> Cómo hacer papel artesanal

Vamos a explicar cómo hacer papel artesanal con las indicaciones de Jan Barbé que fabrica papel artesanal de forma profesional. Puedes hacerlo en casa si quieres y llamarlo papel casero pero. La verdad es que es una auténtica maravilla como explica todo el proceso, los cómo y los porqués.

Saco las principales ideas del vídeo y añado anotaciones mías. sobre todo comparando este proceso con el de la creación del Washi.

Espero que el vídeo esté mucho tiempo online, pero si se pierde por lo menos quedarán las indicaciones.

Tras esto solo queda ponernos a hacer nuestro propio papel para diferentes actividades DIY y cacharreo vario.

Te gustará, Washi, el papel artesanal japonés y nuestro artículos sobre Cómo reciclar papel

Hay que eliminar la lignina de las plantas, que es como un cemento natural que le da a la planta rigidez. mantiene unidas las fibras. Así que hay que eliminarla previamente En el ejemplo del vídeo se usa esparto, cuyo papel también es llamado papel cromo. Tiene mucha estabilidad dimensional. Ideal para litografías.

La lignina es termoplástica y se disuelve con el calor y en medio ácido o alcalino.

Por eso se corta la planta par que tenga la mayor superficie de contacto posible y se cuece en agua con un 20% de sosa caústica, que puedes encontrar en cualquier supermercado, también se utiliza para hacer jabones caseros y en su día era muy común par desatascar tuberías. Esta es una diferencia destacable con la creación del washi, el papel japonés. Ellos no utilizan sosa, pero no sé si es porque el kozo y las plantas que lo utilizan no lo necesitan o porque se están más tiempo cociendo para eliminar bien la lignina.

Se lleva el esparto cortado a la cazuela. Los cálculos aproximados son por cada kilogramo de materia seca añadir 15 litros de agua y un 18 o 20% de sosa, recomienda como medida estándar de la sosa un 20%. Otras alternativas a la sosa son el carbonato cálcico o la sal, que confieren la alcalinidad necesaria para disolver la lignina.

Se deja cocer unas 3 horas. Este tiempo es el indicado para el esparto. Dependiendo del tipo de planta que usemos se necesita más o menos tiempo, desde 1 hora para ciertas gramíneas a 8 horas para el bambú.

A partir de la hora de cocción se empieza a revisar el estado de la planta y de la fibra para saber si ya está bien cocida. Cuando se aplasta bien y se rompe con facilidad es que la lignina ya ha desaparecido y no sigue uniendo las fibras.

Una vez cocido lo deja enfriar en su caldo hasta el día siguiente para asegurar que todos los elementos más duros se han cocido y disuelto correctamente.

No hay proceso de blanqueamiento de la fibra, por lo que el papel tendrá el color que le dé la planta que estemos utilizando.

Una vez cocida hay que limpiarla para quitarle los sobrantes de lignina y la sosa que ha quedado en el agua. Para eso se filtra con un cedazo y se enjuaga bien con agua limpia. Sabemos que ya lo hemos limpiado suficiente cuando apretamos la fibra y el agua que escurre está limpia.

Entonces se bate la fibra en agua con una batidora para soltar bien la fibra.

Se agrega la fibra de esparto a la tina de formación, que es simplemente una cubeta de plástico grande dónde nos quepa el cedazo o formador para formar la hoja. Utiliza un formador vitela, con la hoja metálica cuadrada y de acero inoxidable. Resalta la diferencia con os usados para formar el washi que son de madera o de bambú,

Hay que menar bien la tina para que la fibra se quede en suspensión de forma homogénea y no se vaya al fondo.

Para dejar la hoja utiliza una bayeta sintética (fiselina) sobre la que se deja el papel que se apilará y luego llevaremos a prensar.

Separa las hojas de la pila entre sí, con un soporte de malla sintética para evitar que se peguen. Me llama la atención que en el Washi las ponen todas juntas y parece que tras la prensa se separan con facilidad y no se mezclan las diferentes capas. Antiguamente se utilizaba fieltro entre hojas. Barbé utiliza los soportes para poder colgarlos sin tener que poner pinzas a las hojas y que les queden marcas. en japón vemos que no utilizaban tampoco pinzas sino que los apoyan en unos paneles que tienen en el exterior al sol.

Cada 2 hojas añade más material para mantener el gramaje del papel

Cuando hay suficientes capas pasa a un prensa, en el vídeo hidraúlica o podría ser manual. Y la deja 4 o 5 minutos de prensado.

Al sacarlo separa las hojas y las pone a secar durante unas 48 horas.

Eran recicladores de materias en su época.

El esparto de las zapatillas.

El lino de las sábanas que se rompían con el paso del tiempo se utilizaban para hacer camisas, cuando las camisas se estropeaban se hacían pañales y cuando ya no servía ni para pañales se utilizaban los trapos y luego venía el trapero y se los llevaba a los monilos de papel para reciclarlo, junto con papel, cartón, algodón y otros materiales. Y de ahí se sacaba papel de altísima calidad.

Se utiliza para desfibrar materiales como trapos.

Es una máquina inventada en el siglo XVII. Fue una revolución para los molinos de papel y permitió aumentar muchísimo la productividad. En la actualidad ya no se utilizan de forma industrial.

Consiste en un molón con cuchillas regulables en distancia y presión, realmente es como 2 engranajes y se hace que las fibras pasen por entre las cuchillas o ruedas de los mismos desfibrándolas.

Desfibrar trapo con una pila holandesa puede durar entre 2 y 5 horas. Si quedan fibras demasiado largas luego se producen grumos en el papel. Si al coger la pulpa con la mano y apretar se escapa entre los dedos es que está muy refinada, si no se quedará toda en la mano.

Para papeles translucido y finos se necesitan fibras muy refinadas y cortas. Para grabados calcográficos donde se requiere que el papel no se mueva mucho y tenga buena estabilidad dimensional se usarán fibras lo más largas posibles.

Habla del trapo como el primer material utilizado par hacer papel, la técnica introducida por los árabes y que se extendió por toda Europa.

El papel de trapo es un papel e grandísima calidad que permite la duración de las hojas 1000 o 2000 años, cosa impensable para el papel industrial de hoy en día.